Cocinamos nabo

NABO
Foto: Pete Birkinshaw – CC BY 2.0 | recortada a un cuadro

ANTES DE COCINAR:

Antes de cocinar, lave el nabo con agua fría. No lo pele, para que conserve sus oligoelementos beneficiosos.

COCINAMOS:

Coloque el nabo en una pequeña cantidad de agua fría si quiere que su sabor y aroma quede en el caldo (por ejemplo para una sopa). Si cocina el nabo como un plato aparte, échelo al agua hirviendo, lo que le permitirá mantener la mayor parte de sus jugos. El nabo se debe cocer durante aprox. 20 minutos. El tiempo de cocción se cuenta desde el momento en el que el agua vuelve a hervir. Al poner el agua a hervir, agregue sal (aprox. 2 cucharaditas por 1 litro de agua). También se puede endulzar ligeramente (aprox. 1 cucharadita por 1 litro de agua). Deje cocer con olla tapada, lo que permitirá reducir el tiempo de cocción y disminuir las pérdidas de vitaminas. Comprueba con un tenedor o cuchillo, si el nabo está listo. Si entra suavemente, se puede servir.

DESPUÉS DE LA COCCIÓN:

Una vez cocido saque el nabo del agua, deje escurrir y pélelo. El agua de cocción que contiene nutrientes se puede utilizar para salsas, sopas, etc.

CÓMO SERVIR:

El nabo se puede servir con mantequilla derretida, mezclada con pan rallado tostado.

¡Buen provecho!